Vive la vida

domingo, 28 de junio de 2015

Literatura y feminismo.

Llevo tiempo queriendo escribir sobre esto. Sobre el referente de la mujer en la literatura más reciente. 
Lo resumiré: me pone negra. 
Es inaceptable la imagen que se da de la mujer; principalmente, tiene que ser virgen, por qué sino, ya no cuenta, no es pura ni digna de el amor del hombre. ¿Pero qué mierda es está? ¿Desde cuándo una mujer virgen es mejor que una no lo es? Por el amor de dios, en pleno siglo XXI, se podría esperar algo mejor del ideal de la mujer. 
Sigamos. Aparte de virgen, tiene que ser inocente, prácticamente sin historial amoroso, es decir, que no se haya enamorado nunca, y de repente aparece el ideal y se prenda de él instantáneamente, cómo si fuera totalmente creíble, claro que sí. 
Pasemos a hablar de él, siempre se le describe como un hombre totalmente apuesto, triunfador en la vida y rico. Pero, que tiene problemas de confianza, una infancia traumática, y es la chica el que lo tiene que cambiar. Presentémoslo violento, acosador, agobiante, con problemas de ira, que considera a la mujer una posesión, ningún problema en herirla, y ¡ah! lo mejor de todo, con un gran historial de mujeres. Fijaos en el doble rasero. Él es mejor porque se ha acostado con muchas, y ella porque no se ha acostado con nadie. 
Y luego, que empiece la relación, una relación tóxica, llena de peleas y otras situaciones que rozan (o, no rozan, sino que se produce) maltrato físico y emocional. Pero eh, es el hombre perfecto, y vale la pena luchar por él.
¿HOLA?
Primeramente, si te metes en una relación, ya con intención de cambiar al hombre del que estás enamorada, mal. Y más si se presenta como que es tú deber. Que está roto y TÚ tienes que arreglarlo. Pero que mierda es está. Si tú te metes en una relación, no tienes ningún deber sobre la otra persona. Pueden producirse pequeños cambios, sí, pero son cosas que lleva la convivencia. Pero en que sano juicio se enamora una persona de alguien que sabe que tiene serios problemas, y la única salvación para él es ella. Venga ya. Que cada uno solucione sus mierdas. Se pueden ayudar, sí, pero nada más lejos de la realidad. Dejaos de tonterías. 
Segundo, en muchos libros de hoy en día pintan de amor cosas que no lo son. Que esté obsesionado contigo, que quiera saber a toda horas donde estás, que te prohiba tener amigos, que te registre las cosas, que se crea con el derecho de reclamarte suya: NO ES AMOR. Es un comportamiento psicótico, y totalmente penado por la ley. Espabilemos. 
Y ya para terminar, estoy tan harta que se presente a la mujer como una inexperta social, una boba, ingenua, etc. Dime dónde quedaron las protagonistas fuertes, independientes, capaces de labrarse su propio futuro, con ideas propias, y que tengan una relación de amor sana. Por el amor de dios, sólo estáis degradando a la mujer. Ya está bien. Por qué aún no he leído un libro en el cual la protagonista no sea virgen, no caiga enamorada de alguien irremediablemente, (por una vez podría ser él quien se enamora), y no terminen casados y con hijos no deseados. Una mujer aspira a mucho más que casarse y tener hijos. A una vida propia.